Tipos de adaptación de especies

Los tres tipos de adaptación al medio en biología son procesos que llevan a cabo los organismos vivos. Estos pueden presentarse a nivel fisiológico, en el rasgo anatómico o morfológico y/o en el comportamiento de un organismo que ha ido evolucionando mediante la selección natural.

Las adaptaciones al medio son procesos naturales y necesarios ya que los organismos necesitan encontrar maneras de adaptarse a condiciones que son gradual o repentinamente diferentes a las preexistentes. Esto lo hacen para sobrevivir.

Morfológica y estructural

Estas adaptaciones pueden ser anatómicas, incluidos el mimetismo y la coloración críptica.

Por su parte, el mimetismo se refiere a la semejanza externa que son capaces de desarrollar algunos organismos para imitar características de otros más agresivos y peligrosos para así ahuyentarlos.

Por ejemplo: se pueden citar, el al a de un ave es una adaptación para el vuelo, la relación entre los dientes y la dieta, entre extremidades inferiores y locomoción, entre forma de la planta y hábitat y muchas otras más. Basta revisar los diferentes ambientes tanto acuáticos como terrestres para apreciar las diferentes formas de los organismos que corresponden a cada uno de ellos.

Fisiológica y funcional

Este tipo de adaptaciones involucran la alteración de los órganos o tejidos. Son un cambio en el
funcionamiento del organismo para resolver algún problema que se presente en el ambiente.
Dependiendo de la química del cuerpo y del metabolismo, las adaptaciones fisiológicas por lo general no se muestran visiblemente.
Por ejemplo: los riñones más eficientes para animales del desierto como los camellos, los compuestos que previenen la coagulación de la sangre en la saliva del mosquito o la presencia de toxinas en las hojas de las plantas para repeler a los herbívoros.

Etológica o de comportamiento

Estas adaptaciones afectan a la manera de actuar de los organismos vivos debido a variadas causas como asegurar la reproducción o la comida, defenderse de los depredadores o cambiar de hábitat cuando las condiciones ambientales no son adecuadas.

Entre las adaptaciones de comportamiento encontramos la migración, que se refiere a la movilización periódica y masiva de animales desde sus áreas naturales de reproducción hacia otros hábitats.

Por ejemplo:

El fenómeno migratorio que caracteriza a la mariposa monarca, es el principal mecanismo de adaptación que asegura su sobrevivencia. Cuando el período de luz solar empieza a reducirse y aparecen las primeras masas de aire polar que abaten drásticamente la temperatura en Canadá y los Estados Unidos, la mariposa monarca, se ve obligada a desplazarse hacia latitudes más cálidas debido a la falta de control de su temperatura interna y a la escasez de alimento por el letargo invernal en que entran las plantas de las que se alimenta.

Por sus características morfológicas y fisiológicas, su gran resistencia y estrategia de vuelo, la monarca tiene éxito en el proceso de adaptación y sobrevivencia.